Mejorar la eficiencia del nitrógeno en la producción porcina es un factor importante para reducir las emisiones y optimizar el crecimiento de los cerdos. “Centrándonos en la eficiencia del nitrógeno, podemos tener un impacto real en la mejora de la verdadera eficiencia de la producción porcina” afirma Lisanne Verschuren, directora de Investigación de Alimentación y Piensos de Topigs Norsvin. ¿Qué es la eficiencia del nitrógeno y cómo puede contribuir la investigación a mejorarla?
¿Qué es la eficiencia del nitrógeno y por qué es importante?
“La eficiencia del nitrógeno es un indicador de la cantidad de nitrógeno que utiliza el organismo, en lugar de excretarlo al medio ambiente. Aunque el nitrógeno se asocia a menudo con efectos negativos sobre el medio ambiente, en realidad es un componente esencial para el crecimiento de las plantas. Se convierte en un problema cuando hay demasiado. Esto daña el medio ambiente y, por supuesto, es un desperdicio de componentes esenciales.
La optimización de la eficiencia del nitrógeno está estrechamente relacionada con la composición del pienso y el funcionamiento del sistema digestivo del cerdo. El nitrógeno es un componente de los aminoácidos esenciales: que forman las proteínas que los animales necesitan para crecer. Para un crecimiento óptimo, los cerdos necesitan aminoácidos en las proporciones correctas. Si la disponibilidad de un solo tipo de aminoácido es insuficiente, el organismo no podrá utilizar plenamente los demás aminoácidos disponibles. En cambio, el organismo utilizará esas proteínas como fuente de energía y excretará los componentes que no puede absorber, entre ellos el nitrógeno, en el purín y la orina. Cuando hablamos de optimizar la eficiencia del nitrógeno, hablamos de optimizar el crecimiento del cerdo y al mismo tiempo minimizar la excreción de nitrógeno”.
“Observando la biología del cerdo, podemos establecer mejores directrices para una alimentación óptima.”
¿Es más importante la eficiencia del nitrógeno que la conversión alimenticia? “Yo diría que centrarse en la eficiencia del nitrógeno es una forma más avanzada de optimizar el crecimiento del cerdo. El enfoque habitual de la eficiencia alimentaria se centra en la cantidad de alimento que consume el animal, pero podemos aprender mucho más observando la composición del pienso. Por así decirlo, calidad en lugar de cantidad. Si nos fijamos en la biología del cerdo y comprendemos cómo crece y qué procesos ocurren en su interior durante ese proceso, podemos establecer directrices mucho mejores para una alimentación óptima”.
¿Qué relación tiene esto con la genética?
“En nuestra investigación examinamos, entre otras cosas, la capacidad genética de crecimiento de los cerdos. ¿Cuánto puede crecer un cerdo al día y cuáles son las cantidades y proporciones exactas de proteínas y energía necesarias para utilizar plenamente esa capacidad, sin exceder la cantidad que el cuerpo puede utilizar para el crecimiento? Esta información puede utilizarse hoy para mejorar la eficiencia del nitrógeno en el futuro.
También investigamos las diferencias genéticas en la digestión de proteínas entre las distintas líneas, utilizando tecnología NIRS para analizar muestras de excrementos, porque sabemos que algunos animales tienen una mayor eficiencia de nitrógeno que otros. Esto podría ser valioso para nuestros programas de selección, aunque al combinar esta información con la investigación del microbiota y los metabolitos sanguíneos, también hemos aprendido que los factores ambientales son, al menos, tan importantes para determinar la eficiencia del nitrógeno de un animal, como la genética.”
¿Cómo pueden beneficiarse los productores de porcino de esta investigación?
“Basándonos en las directrices para una alimentación óptima, proporcionamos manuales a los productores de piensos y a los productores de porcino para las distintas líneas de Topigs Norsvin, de modo que sepan cómo alimentar para una eficiencia óptima del nitrógeno. Aplicando esas directrices, pueden reducir sus emisiones y optimizar el crecimiento de los cerdos, reduciendo los costes de alimentación.
En el futuro, podríamos avanzar aún más, si logramos aplicar los resultados a nuestros programas de selección, lo que tendría un impacto aún mayor. Aunque en realidad, descubrimos que los cerdos actuales ya tienen una muy alta eficiencia en el uso del nitrógeno, lo que sugiere que nuestros programas de cría actuales, de hecho, ya contribuyen a mejorar la eficiencia de nitrógeno.”
